lunes, 29 de noviembre de 2010

Mil y uno

Tanto beso suicidándose
En el rincón de esta boca que no los sepulta
Esperanzados se estrellan
Creyéndose vencedores
Pensándome poseída

Yo llevo mil besos
En las suturas de la piel
Pues han sido miles
Los hombres que olvidé olvidar

Se revuelcan con el recuerdo
Y yo les recuerdo revolcarse en mí
Calentándome lo gélido de la piel

Toda mi sangre emigra al sur
Retumba en las paredes de mi vientre
Y en la cama
El silencio se vuelve traición.

Posesa

Mándame a buscar la muerte
Accederé feliz...

jueves, 14 de octubre de 2010

Requisito

Húndete sin límites
Oh mi bien
Dame la bondad de un niño

Lanza la moneda
Al pozo que dormita
Como un sueño
Con esperanza

Amasa la arena
Que bajo el musgo
Yace fango
Y bajo el fango
Quema la lava

No me enumeres
En mí cabe el mundo
Y mi tiempo
Se da en el sur

Se requiere hombría
Para tolerar esta claridad funesta
Que la vida ha hecho de mí
Soy la lívido del sol
Y no tolero que me posean
Con los ojos cerrados

lunes, 20 de septiembre de 2010

Lección 2

Yo he sabido amarme, poseerme
He sido hombre y mujer
Bestia y ángel
Arrebato de 5 dedos
Estremecido punto cardinal
Una mujer amando a SU mujer

Yo enciendo mis manos
Trastorno mis curvas
Jugueteo y jugueteando
Me hago reír

Ni un retoño queda desatendido
Ni un respiro queda ignorado
Avivarme no requiere de fantasía
más que de sentido

En mi gruta toda yo
Soy agua bendita
Mi mano
Caliz sagrado
La coge y recoge;
Así, Fanática
Devota
Ungiendo mi frente mi pecho y mis labios
Me hago religión

Siempre seré gobernante de mi tierra
Por eso no me da miedo
Arrodillarme ante un hombre
Me humillo a gusto
Yo
Yo soy voluntad

martes, 24 de agosto de 2010

Oprime tus sentidos

-Mátame, te pedí
Y lo pensaste…
Rodeaste con tus brazos mi cuello,
Lo acariciaste
-Pártelo,
Quiébralo, te ordené
Déjame ser esa mujer
Que siempre soñaste lastimar
La esclava
Que siempre habías deseado.
Me miraste con miedo
-Mátame, te imploré
Mis piernas yacían abiertas
Anhelando
Tu puñalada final,
Agresiva
-mátame, te supliqué
y te llenaste con palabras,
Tus manos se ablandaron
Tus ojos, como asquerosos
Terrones de azúcar, me vieron
Desprecié tu cobardía
No supiste amarme
No supiste

martes, 3 de agosto de 2010

Lección 1

Corre hasta donde te dé la suela
Luego corre más

Poseerme cuesta la vida
Y a veces… la muerte
Entrar en mi vientre
Te vuelve espectro
Te regresa al inicio de todo
ya no eres
sino un pensamiento
y ni eso…quizás

Escúchame comedido
Atiéndeme con precisión
Esta es una verdad cruel y absoluta
Al final de mi abismo
Solo hay vacío
Después de mi cuerpo
No hay más cuerpos
Te quedará el alma
Apresada entre mis piernas
Y querrás correr

Probablemente huyendo
Te sabrás
Hecho nada
Nada anhelando mis líneas
Nada deseando este gemir
Nada queriéndolo todo
Pero nada

lunes, 21 de junio de 2010

Letrada pasión

Al acecho te acaricio
Voy a tocarte allí
Donde eres todo sentido

Mi mano…
La que escribe
Es la misma que te masturba

Tu mano…
Esa que también traza
Se hundirá ahí
Donde soy toda culpa

El acto de escribir
Implica un poder divino
Y tú y yo somos dos escritores
Que se aparean

Nosotros
Tuteamos a la noche con naturalidad
Letra propia y ajena
Revuelta
Que nos calienta los rincones

Ejércitos de abismos
Ahuecándonos el vientre

Somos la sal de la tierra
Vía subterránea
Sabor fundido en los colmillos

Cuando nuestros cuerpos
Quedan entrecruzados
En medio
Sostenida
Yace la eternidad.

Una última súplica…
Apenas brote el orgasmo
No olvides estamparme tu firma.

miércoles, 16 de junio de 2010

Epitafio

En tu desnudez
te veo...


Más allá de la tez
Acunas una tristeza
Y a mi piel le faltan metros
Para acobijarte el pesar

Te otorgo lo que puedo
Una caricia tierna
Atenuante
Netamente disfuncional

Cargas la sombra tendida al suelo
Y sin embargo…
La llevas a cuestas

Si tan solo yo pudiera
Rozarla
Ahuyentarla con mi aliento

Abro mis muslos
Con ambas manos,
Desesperanzado metes tu cara,
Tus labios se unen a mis otros labios,
Allí…
Con la boca hecha hueco
Hacia mi caverna
Gritas
Las venas de tu cuello se brotan
Y tú gritas
Las orejas se te coloran
Y gritas
El aire se te escapa…
Gritas

Ah el placer
Tu alarido calentándome el útero
Mi cáliz encubándote las penas

Me has preñado con tu lamento
Lo siento inquieto
Desorientado
Palpitando temeroso

-¡Pronto!
Séllalo con tu miembro
Que aun no es hora

Hazme mujer primero
Empújalo con cada embestida
Drógalo con mi esencia

Ah qué divinos son tus infortunios
Cuando habitan en mí.

No te detengas
Nada restrinjas…
Mi orgasmo nos hará libres
Cada pena desdichada
Correrá por mis muslos
Parida
Agonizante
Derrotada

Pobres lamentos
Ignorantes…
A la altura de mis rodillas
Está dispuesto ya su funeral.

sábado, 12 de junio de 2010

Péndulo insomne

Llevo una blancura diabólica en la piel
Como el negativo de una placa
Conjuro cabalístico
Secreto que tus labios
Tornan rosa

Tus dedos, que la acarician
se hunden en mi fervor mojado
Y mi hangar se ha encendido

Los ojos se me han puesto suplicantes
Cual reverencia.
La piedad que tus manos me conceden
Me vuelven talismán
De un planeta despoblado

Gimo, gimo… casi como un susurro
Aire tirado de mi boca
Y tu lengua se vuelve sabia
Sin pronunciar palabra alguna

Ansío que tu arpón
Atraviese mi mar;
Entre dos olas
Expongo mi carne desvergonzada.

Un solo golpe ahuyenta la sombra
Que hay entre tu piel y mi piel

Ballesta fulminante
Aúllo como animal estocado
Por la divina zozobra devastada

Llevas en tu centro
El ritmo del mar picado
Y a mí me llueve salitre en la piel

Mi boca entre abierta
Mis gemidos largados
Y este temblor profundo
Te anuncian
el arribo

Me vuelvo remiendo de
Sábanas destiladas
Suspiro entre risas
Péndulo insomne
Orgasmo infalible

En mi cuenca revolotean abejas
Siguiendo la senda de túneles de hormigas
Y en mi pecho han labrado su panal

Oscura potencia
Tu voz intacta
Marcó el fondo
Limó mi piel
y el cielo ha quedado en agonía
Por saberte terrenal.

miércoles, 9 de junio de 2010

Jugoso Manjar

Hago de mis labios un paréntesis
Cúpula de calor húmedo
Pausa larga que se desliza
Empañando tu cumbre
Despacio, suave…
Como la bruma

Lo apreso en mi boca
Como una Matrioshka
Y mi lengua
Juega con él
Cual niña rusa

Me pierdo en tu bosque
Beso tu roble
Desde la raíz a la punta
Ah para hallarme
Con tu ciruela enrojecida
Que me regala su néctar
Tímidas gotitas
Endulzándome el aliento

oh Monstruo de Cobalto
Trazo oscuro febril
Quiero sentirte llorar
Envuelto en mi niebla

domingo, 30 de mayo de 2010

Intrusos

Caes suavemente sobre mí
Como pluma deslizándose en la seda
Mi cuerpo
Destellante de calor húmedo
Implora ser poseído.

¡Maldíceme! te digo
Déjame agotarte la sangre
Que las curvas quieren
descocerme la piel

Exquisita concavidad engranada
Encausa mis parábolas
de una sola embestida
Sin mesura
Sin afecto

Quiero ser sacudida
Por espasmos de placer
Ruborízame hasta la piel más fina
Justo en ese terreno donde la carne
Se abre bajo un trigal

Poséeme distanciado del amor
Que otros desde lejos
Sin recato alguno
Miran atónitos
agresivo encanto disfrutado
Divino deleite impetuoso

Míralos morderse los labios
Míralos regodearse de ansias
Seguro que él sólo sabe amarla
Seguro que ella sólo ha querido quererlo

Tú… tú gózame
¡Palmea mis nalgas con ímpetu!
muerde mis pezones
y haz de mi sangre tu alimento
Golpea mis caderas
Con cizaña altiva
Sé mi dueño

Ahora repara en ellos
Gira la cara y velos embelesarse
Con el gemido apretado en el vientre
Y los dientes tiritando de gusto
Con las pelvis enardecidas
Siguiendo tus movimientos

¡Ah! el placer de tus manos
Ahogando mi cuello
¡oh! el gusto de verte
Tirando de mi cabello
y ellos…
Satisfechos
Intrusos en mi orgasmo… certero

viernes, 28 de mayo de 2010

Entrega ancestral

Resuenan tambores de tribus primeras
Y te ofrezco un nido de caricias salvajes
Gemido sempiterno
Caverna de miel

Resuenan tambores de tribus primeras
Se te engruesan las venas derribadas
Temblor que desata locura
Distendida piel en la raíz intranquila

Resuenan tambores de tribus primeras
Centro selvático
Que huella mi piel
Tierra fértil
Que añora ser preñada

Resuenan tambores de tribus primeras
Mi gruta se hace campana
Donde redobla tu ser

Resuenan tambores de tribus primeras
Las piernas abro complacida
Introduzco ambas manos en mi centro
Y sin tristeza alguna
El útero me desgarro

Resuenan tambores de tribus primeras
Y del cúmulo fértil
Desprendo los ovarios
Con ojos de amor
Y Manos extendidas
Haciendo reverencia te los regalo

Huevecitos de cariño
…para ti

Resuenan tambores de tribus primeras
Concurrida la raza
Presurosa va al encuentro
Mis entrañas colgantes
Llevas ahora en tus manos
Y cual si fueran de cristal
Con ternura las besas

Resuenan tambores de tribus primeras
Espero ansiosa la medida
Volteas a verme como el que ve una diosa
Y engulles el plato por mi ofrecido
Devoras mi índole
Sin escatimar

Resuenan tambores…resuenan
Y entre tus brazos mi piel acaricias
Sabiendo de mi vientre cuna
Nido cerrado
Fecundidad.

jueves, 27 de mayo de 2010

Llanto primitivo

En la oscuridad
Botuto abierto
Ola eterna
que aguarda el arribo
Con silencio oceánico

Tu rayo enfurecido
le atraviesa a la mitad
Entre relámpagos
el cuerpo se contonea
Mientras la muerte
Se perfuma con el aire

Mis piernas languidecidas
Se vinculan
Locura primitiva
Buscan ahorcar tu despedida
Ahogar mi súplica
Pero es incontenible

Como represa fracturada
Te lloran mis ojos, mis senos
Mi espalda, mi vulva, mis pies

Apreso tu miembro en mi jaula escarlata
No dejo un milímetro de distancia,
Aunque amenacen kilómetros
Como imponente tempestad

Qué piel tan delicada
Desgarraste con tus dientes

Un pavor que huele a yodo
Se ciñe en el pecho
Y tu centro endurecido
Aun palpita en mi haber

Con las uñas en la arena clavadas
Veo como se alejan tus mareas
Alarido de medusa enloquecida
Iracunda cabellera que se alarga
Para hacerte prisionero

Cien búhos se posan en la cabecera
Es mi lamento su canto desprendido
Ráfaga de furia y dolor
Jadeo padecido
Temida solitud

Mi gemido implora tu piedad
La negrura te ciega
me vuelvo cáscara desnuda
Flagelado pichón a la intemperie
Besas las pesadas bahías de mis ojos
Y eres en la luz letargo codiciado
Ancla suspendida en mi oscuridad.

martes, 25 de mayo de 2010

Canción de cuna

Entre mis manos
Tu miembro recién nacido
Acunado

Mis laderas abiertas
Para arrullarlo
Le musitan una canción.

Mientras me meso,
apostado en mi pecho
Te amamanto

Y ese virilismo
que no te deja sucumbir

Aun más fuerte es el abrazo
Aun más sutil la caricia materna
Quieres degollarme el instinto
Y mi cuerpo no deja de bambolear

Te arremangas dentro de mí
No lo resistes
Y yo te beso la frente

Has entrado en mi caverna
Orgulloso, enaltecido,
Como niño
Y has salido humilde,
Sucumbido
Hombre.

lunes, 24 de mayo de 2010

Muñequita de trapo


Por hechizo
Caigo sumisa
Ante la voz enfurecida de mi hombre

Dominada

Me vuelvo muñequita de trapo
Cabello de estambre
Ojos que miran vacíos
Vestidito de tul
Pantaletica descocida…
Arrancada y olvidada de inocencia.

Me separa las piernas
Sé que no debo moverme
Mete sus dedos entre mis telas
Y de un tirón me raja su satisfacción

Salen de mi frontera
Rasgada
Tersos hilitos blancos de felpa
Que con arrebato empuja.

Mis botoncitos amenazan con desprenderse
Y la sonrisa
Como línea cóncava
más que dibujo
Es entrega.

sábado, 22 de mayo de 2010

Te lo ordeno

Irrumpe mi interior en luto
Que ruja amenazadora
La altivez de mis instintos.

Turba mi calma,
Que dulces ansias llenen mi cuerpo
Y sólo tu forma de hombre
Flote sobre él.

Toca mi todo
y no te contengas
sumérgete en la lentitud
de dos cuerpos
que ruedan apegados el uno con el otro
Como una enredadera

Entre mis puntos
Torna una y otra vez
hasta saciarte,
que mi sudor y el tuyo
corran por un solo cuerpo
como la sangre que corre
Incansable por las venas.

Toma tu brocha
Deslízala sobre las líneas de mi cuerpo
Recoge toda mi piel
Arráncala de mí
Clávala a una pared
Y haz la mejor de tus obras.

Frágil ecuación tachada

Hoy di a luz al amor
Corrió de mi vientre
calle abajo
buscandote

Hoy mis pensamientos
Se fueron de paseo
Dejándome sentirte

Hoy el sol se fue
Sin que lo viera
y sin mi presencia
se sentó la luna
a oirnos respirar
El tiempo corrió sin mí.
Hoy se duplicó la grandeza
Y yo sólo te sentía

Ayer sólo te pensaba
Hoy sólo te sentía

Sucede que mi cuerpo
Perdió toda fuerza
Hoy te pensé menos
Y te amé más

frágil ecuación tachada

Hoy atravesé
El cristal de tus ojos
Caminé tu cuerpo
Dejé las pisadas de mis manos
En tu pecho
y en tu vientre
se acostó una canción a soñar.

Hoy se doblegó el mundo
hoy volviste a este callejón
te sentaste en el charco
entre dos paredes espías.
y retornaste en mí.

Hoy no te rememoré
Volviste...


Olor de vicio desquiciado

Inhalo bocanada tras bocanada
Tu olor que se riega
Entre las ranuras de mis nudillos.
Se lo arranco a mi mano de un tirón
Lo inhalo
Para respirarme el vicio
de ser tuya

pasión desbordada
Caída...

Tus dedos jugando esta noche
danzan dentro de mí,
aullido a la luna
testigo y cómplice,
tango sin nombre
que nos mueve
como bandoneón encorvado
Dilato mis horizontes
Para expandirlos
Y recibirte alegre
Cada vez que te vas y vienes con más fuerza

Mi mano se acaricia
En tu suma
Hacia arriba, hacia abajo
Viéndote derramar
Blancuzcas lágrimas de alegría
Mis senos dispuestos al sol
voz perdida en gemidos
respiración acelerada
pies encorvados
y mis piernas
como tijera
lista para cortarte los dedos
y llevarme tu magia
y aspirarla de tus caderas.

tácitamente me ordenas que no gire el rostro;
me sabes descerebrada;
quizás por eso
desobedezco tu comando
giro el cuello desorientado
y te apuñalo con mis ojos

fue allí
con mi orgásmica risa
cuando comprendiste
que al punto de salvarme
Terminaste siendo el único culpable
De tirar al suelo la memoria que ya estaba desvalijada


Éxota

Tú, ese buen sabor en mi Boca
Eso que llevo en
las entre capas de la piel
Esa locura en la que me reconozco
Esa percepción de lo humano
Esa impresión sólida
fulgor de saberme arrinconada
goteando súplicas
como si el vientre
me llorara tu ausencia

Ese único momento único
En el que los ojos
prentenden salir de sus cuencas
y rodar por tu cuerpo

Yo...

Yo sólo soy una éxota
Que intenta adentrarse

sábado, 13 de marzo de 2010

Domingo de resurrección



Bueno me dispongo a escribir, cosa poco fácil después de ser madre; encontrarle los recovecos al tiempo y darle la vuelta para apropiarse de ellos y llenarlos con letras, con voluntad de hierro y oídos cerrados al mundo, hace años que le huyo a esta confrontación, porque a sabiendas de mi deploro me declaré derrotada de antemano, pero me encontraron los demonios de Pan, Dionisio y afrodita hicieron el amor y mientras eran uno me embriagaron en placer, me recorrieron el cuerpo con su aliento, el de él que es mi dios, con sus manos de pianista que nunca han tocado el frío marfil de una tecla, ni blanca ni negra, esas manos que no conocen el bordón ni la clavija, pero que me tocan y arrancan de mí la nostalgia del fagot, la dulzura de la flauta y la tristeza de una viola, como el magno ejecutante de la sinfonía de mi piel, y así me regalaron una historia y ahora no puedo más que sentarme a escribirla.
Sí; después de haberme olvidado de sus grietas, de sus ojos infinitos, de su espalda que era mi mejor terreno, de sus labios carnosos que erizaban mi espinazo, después de cuatro años que parecieron décadas, me acompañaba de nuevo la intimidad de una tímida luz que amenazaba con irse y dejarnos a solas, y su cuerpo ínclito, enaltecido, subyugado ante mis caricias.
Jazz era lo que sonaba al fondo, no es que eso fuera de gran influencia para lo que se gestaba entre nuestros cuerpos, pero allí queda, como mero dato ilustrativo, como para que no se me olvide que instrumentos acompañaban el vaivén de nuestras almas…y fuimos marionetas de los dioses, porque un placer así no es mortal.
Cada roce sublime me arqueaba el alma lo mismo que mi espalda, mis prejuicios y mi historia. Mi filosofía entera se desplomó en el piso para declararse suya, como si los libros que tantas noches me acompañaron sólo hablaran de él; de su cuerpo, de su forma que a mis ojos se volvía cíclica, como una elipsis de respiros entrecortados, de gemidos desbocados; sus lánguidos dedos se posaron en los ramales de mi cabello, y mientras mi cuello se emblandecía me desdoblé y pude verme en un perfecto picado, como si los dioses me regalaran aun más que lo que mi cuerpo sentía, me reconocí feliz, amada, me reconocí posesa.
Cuatro años sin sexo oral, 5 palabras que pesan en el cuerpo, y él ignorante, desentendido bajaba las líneas de mi cuerpo como cosa de todos los días, mi sexo dormitado comenzaba a despertar, mis labios imploraban dientes para morderlo hasta sangrar, sangrar una regla que sí me declarara mujer… su mujer.
Pero la biología me venció, la tensión se me fue al piso, tuve que parar, tuve que explicarle, hacerlo parte de esa parte de mi historia, porque sus labios eran sagrados y el iba a beber de mi cáliz un vino añejo, y al decirle pude ver mis palabras físicamente salir de mi boca, como si la oruga de Lewis Carol me echara su humo de letras en la cara y me arrancó del sofá el ojo del huracán de la conciencia, cuatro años dios, eran sus labios los últimos que… yo estaba declarada propiedad Noguera sin saberlo. Que insulto el de los dioses, hacerme creer dueña de mi sexo.

-El llegó a mí, llegó a mí de nuevo, dios qué es esto, cómo es posible que se me remuevan las entrañas de tal manera, me he entregado y ahora no puedo nadar porque le he dado todo mi mar, no puedo correr porque le regalé mis llanuras, mi canto se lo he dado para que le armonice el camino, mi arte le pertenece desde tribus primeras, y él, él se llevará el olor de mi ciudad y mi sexo a otro continente demasiado frío y recio como para acompañarlo; Trato de no pensar en eso, y lo logro, salgo victoriosa del auto sabotaje, y me pierdo en su nuca, en nuestros cuerpos retorcidos como árboles que crecen a la sombra.
El pasado ha quedado atrás, el futuro está suspendido y sólo nos queda el presente, divino presente, sobrio de alcohol, embriagado de placer, porque eso sí, para sentirnos no necesitamos más que nuestras manos…bendito sea su sexo que sin estar dentro de mí me hace orgasmar de mil maneras; la pausa de cigarrillos y voz trasnochada se destila en la noche y sus labios vuelven a mis labios, y viajan del norte al sur, bendito sur que le espera como a un libertador que reclama su tierra. Han llegado las tropas, sin violencia, pero con determinación, y se ha escuchado en mi epicentro el grito libertario de un pueblo enardecido, sediento de victoria, nuestra victoria.
Uno, dos…tres orgasmos han sido su bandera, ha dejado de ser un forastero, en mi caverna ha encontrado su identidad y puedo sentirla, regresa a mi boca sabiéndome esclavizada, y me da de beber el olor de mi patria, el sabor de mis cadenas caídas.
Vaya cuaresma la mía, vaya desierto en el que me había perdido, mi flujo le ha bautizado la frente cual miércoles de ceniza y es domingo de resurrección.
5 horas han pasado entre caricias, risas, embriaguez de placer y jazz, nuestro ropaje cae al piso junto con los prejuicios, nos sumergimos en el colchón, nos hundimos en nuestros cuerpos, hasta bañarnos el alma; cuántos besos, cuántos agasajos dibujándonos la piel, mi lengua se mueve cual serpiente que va en busca del pecado, él lo sabe, él me sabe, y yo, yo busco su sabor; guiada por el aroma de sangre de amapola llego al Vesubio, y mi boca le posee como una venganza de Pompeya.
Mis ojos se elevan y le ven, allá en la altura; no quiero percibir su placer, quiero que me sepa su dueña. Me vence el amor, y la venganza se hace tierna, la serpiente es dominada, y dios me guía el encanto, paso de propietaria a propiedad y aun así me sé su poseedora.
Me deleito, no escatimo tiempo, me pierdo en su golfo y le recorro todas las costas, no espero nada distinto a sentir su tibiez enardeciendo mi boca y ahora Pompeya implora ser sepultada a manos suyas, como si su lava fuera agua bendita que viene a cambiar la historia.
Mi dios baja sus manos y acaricia mi frente, me despierta del embeleso, está listo para poseerme, lo veo en sus ojos, por mis muslos corre el yugo caído y humedece mi piel; el espacio gira y me encuentro bajo su pecho, mis piernas doblegadas se rasgan a la mitad, esperan su arribo; se que debo implorarle, y lo hago, su mano izquierda me toma el cuello mientras la derecha se posa en mi cabeza, soy su presa lista para ser cazada y hasta casada, navega en mi zaguán, oscila como un péndulo porque le gusta jugar a enloquecerme, su arrogancia me fascina y le imploro una vez más, se desliza suave como un gota de mercurio retozando en mi marea y sus manos me sirven de respaldo para que el alma se me quede en el cuerpo y lo viva.
Respiro desde el diafragma para que el aire no me falte, y siento como mis celdas se abren, cual capullo rebelde bajo un sol incandescente, oh magnánimo astro, magnánimo cúmulo que me llamea el vientre, soy horno de barro, soy leña ardiente, soy Serengueti y el corre cual gacela por mi centro levantando el polvo tras su estocada.
Me posee y se vuelve lluvia, le siento tocarme en cada resquicio aun y cuando sus manos siguen sujetándome el alma, soy un halo que pende de un ángel caído e invoco a dios, sólo para agradecerle la gloria de ser suya.

No te vayas todavía.


No, no te vayas todavía
Perfila tus manos en las mías de nuevo
_ ¿Qué?
– Bésame.
No te vayas todavía
El frío se cuela por las ranuras del umbral...mientras en mi cuerpo se hace la tibiez
Tal vez podría llover y podrías mojarte
Sé que estamos en el quicio de tu casa
Sé que no está lloviendo
Pero podría suceder
¿Para que arriesgarse?
No te vayas todavía.
Bésame una vez más
Que la fuerza de tu aliento me da fuerza
Me embriago con cada suspiro
Que viaja de tu boca a mi boca
Olvidemos el mañana ¿sí?
Ya veremos en el día
Pero por favor
Esta noche
No te vayas todavía

Tuya.


Volumen caído de mi voz

Cuando no hace referencia a ti

Principio sin fin

De lo inmóvil en el aire sin tu presencia

Telarañas tendidas

Sobre los rincones de mi cuerpo

Que no has palpado

Poseedor de esta alma

Que se chorrea embelesada

Por el borde de la taza

Que diriges a tu boca

Para tomarla

Deslízome sobre tu cuerpo

Dejo caer mi espalda

Sobre tus manos que la sostienen en el arco

Abro mis brazos

Expando mis límites

Soy tuya.